"El Gobierno condena enérgicamente la detención de dos barcos comerciales en el estrecho", dice el comunicado.
El ministerio instó a Irán a liberar inmediatamente el petrolero que sigue detenido, el Stena Impero, y expresó solidaridad con el Reino Unido.
Por su parte, el portavoz de la oficina de la primera ministra británica, Theresa May, declaró que las acciones de Irán son preocupantes.
"Recomendamos a los barcos británicos que evitaran pasar por la zona", dijo a los medios el portavoz y añadió que el Reino Unido está en contacto con otros países, "este fin de semana se celebrarán las consultas".
La Cancillería de Bahréin también condenó las acciones de Irán y llamó al país persa a "abstenerse de las acciones peligrosas y hostiles y liberar inmediatamente el petrolero Stena Impero".
El 19 de julio, los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán informaron haber apresado un petrolero británico en el estrecho de Ormuz por violación de las normas internacionales.
Junto con el Stena Impero fue detenido un petrolero de bandera liberiana, Mesdar, aunque este pudo continuar su travesía unas horas después. Según las autoridades iraníes, continuó su ruta después de que las fuerzas armadas le hicieran una advertencia sobre el cumplimiento de las normas de seguridad.
El Stena Impero, que cuenta con una tripulación internacional de 23 personas, incluidos nacionales rusos, fue conducido al puerto de Bander Abas.