"Theresa May nos presentó unas pruebas", declaró en una rueda de prensa conjunta con su par francés, Emmanuel Macron, tras una cumbre de la UE en Bruselas.
Indicó que Francia hizo una conclusión similar a la británica.
"Esta conclusión nos permite establecer con certeza total que la sustancia aplicada (…) provino de Rusia", declaró Macron.
En este contexto, los líderes de ambos países agregaron que anunciarán próximamente unas medidas coordinadas contra Rusia en respuesta al envenenamiento de Skripal.
"Lo que sucedió en el Reino Unido es un caso sin precedentes, es un ataque contra la seguridad y la soberanía de un país aliado, país miembro de la UE que requiere una respuesta", subrayó el presidente francés.
El 22 de marzo en la cumbre de la UE en Bruselas los líderes europeos apoyaron la evaluación de Londres sobre la "altamente probable" responsabilidad de Rusia por el caso Skripal, y decidieron llamar a consultas al embajador de la UE en Rusia, Markus Ederer.
Serguéi Skripal, exoficial de inteligencia militar rusa reclutado en los años 90 por el servicio secreto británico MI6 y naturalizado en el Reino Unido, y su hija Yulia fueron hallados inconscientes el 4 de marzo cerca de un centro comercial en la ciudad de Salisbury.
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Ambos continúan en estado crítico y reciben tratamiento por intoxicación con una sustancia de acción neuroparalizante.
Moscú, que rechazó todas las acusaciones por infundadas, exigió en respuesta la salida de 23 empleados de la Embajada británica, además de anunciar el cierre del consulado británico en San Petersburgo y de la oficina del British Council en Moscú.
