La parte occidental de Alepo está controlada por las tropas gubernamentales, los extremistas de distintos grupos, que se encuentran en el este de la ciudad, atacan las áreas residenciales de otras partes de Alepo.
"Cabe recordar a los que creen que (realizar ataques) es necesario para levantar el asedio de Alepo oriental que nada justifica el uso desproporcionado e indiscriminado de armas, incluidas las pesadas, en las áreas residenciales, eso puede corresponder a un crimen de guerra", declaró De Mistura.
De Mistura señaló que los habitantes de Alepo han sufrido demasiado, y ahora necesitan que el fuego cese en toda la ciudad.
Antes el domingo se informó que los terroristas utilizaron armas químicas, bombas con gases tóxicos, en un ataque en el suroeste de Alepo.
El 18 de octubre Rusia y Siria suspendieron los bombardeos contra los grupos terroristas en el este de Alepo y establecieron el día 20 una pausa humanitaria para que civiles y combatientes abandonaran esta parte de la ciudad, que se prolongó por tres días.
Los terroristas rehusaron abandonar Alepo y tampoco dejaron que salieran los civiles, amenazándoles de muerte.
Lea más: De Mistura responde qué pasará si continúan los bombardeos en Alepo
El 23 de octubre, al expirar la pausa, el Ejército sirio y las milicias populares iniciaron una operación a gran escala en el sur de Alepo para expulsar a los terroristas.
Los ocho corredores humanitarios establecidos para la salida de los civiles y los radicales siguen funcionando hasta la fecha.