Australia, que recibe grandes cantidades del petróleo a través del Ormuz, anunció el 21 de agosto que contribuirá a una misión de seguridad marítima internacional liderada por EEUU en la zona. Según las previsiones, enviará unos 200 efectivos —en su gran mayoría, tripulantes de una fragata que permanecerá en Oriente Medio durante seis meses a partir de 2020— y un avión de vigilancia marítima Poseidon P-8A, por un mes, antes de finalizar este año.
Acto seguido, el diplomático quiso "dejar claro que esto no significa que estemos absolutamente de acuerdo con la posición de Estados Unidos sobre Irán o el acuerdo nuclear iraní".
El embajador resaltó que Australia no está de acuerdo con la retirada unilateral de Washington del acuerdo nuclear con Irán.
Las tensiones entre Washington y Teherán continúan en aumento desde mayo de 2018, tras la retirada unilateral de EEUU del acuerdo nuclear con Irán, conocido como Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) y la imposición de varios paquetes de sanciones contra la República Islámica. Un año después de que EEUU abandonara el pacto nuclear, Irán suspendió parte de sus compromisos en el marco del PAIC y anunció que seguirá reduciéndolos progresivamente cada 60 días.
Misiles de EEUU en Australia
Además, Meehan declaró que Australia no desplegará en su territorio misiles de medio alcance estadounidenses.
El jefe del Pentágono, Mark Esper, antes de su visita a Australia a principios de agosto, había apuntado a la importancia del despliegue de las armas convencionales de alcance intermedio en la "arena del Indo-Pacífico".
"Tanto nuestro secretario de Defensa como nuestro primer ministro dijeron que no los desplegaremos; por supuesto, no puedo predecir que puedan hacer el próximo primer ministro o el próximo Gobierno en cinco o diez años, pero nuestro primer ministro dijo que no lo haremos, y esta es una respuesta bastante clara y definitiva", dijo el diplomático.
La visita de la delegación estadounidense a Australia coincidió con la salida de EEUU del Tratado de Eliminación de Misiles de Corto y Medio Alcance (Tratado INF).
El 2 de agosto, Washington abandonó definitivamente el Tratado INF que prohibía el despliegue de misiles balísticos y de crucero con alcance de entre 500 y 5.500 kilómetros, firmado con la URSS el 8 de diciembre de 1987.