Alemania ostenta desde principios de mes la presidencia semestral pro témpore de la Unión Europea (UE), y por tanto será quien corra con la carga de las negociaciones y las presiones desde los distintos bloques de países.
"Lo que se está discutiendo es algo que nunca había pasado: por un lado los presupuestos comunitarios para los próximos siete años y además un plan de reconstrucción para Europa. Y eso al final es condicionante", apuntó Hernández, doctora en Estudios Europeos y académica de la Universidad Diego Portales de Chile.
"La salida del Reino Unido ha dejado un hoyo muy grande en el presupuesto. Era un contribuidor neto, con lo cual siempre se habló que su salida iba a implicar que todos los países tendrían que aportar más al fondo europeo", recordó. En la actualidad, cada integrante de la unión aporta alrededor de 1,16% de su presupuesto nacional.
"De esos fondos que van a la UE hay países como España que tienen saldo positivo porque reciben muchas ayudas para las regiones y para la agricultura. Se beneficia más de lo que aporta. Luego hay otros países como Alemania, o el saliente Reino Unido, que aportaban más de lo que recibían", describió.
Alternativas
A esta cumbre los líderes llegan con dos caminos posibles a recorrer para llenar "el hoyo" presupuestal abierto por el Brexit: que cada socio aporte más dinero o reducir los presupuestos comunitarios.
Por el contrario, Holanda, Austria, Dinamarca y Suecia quieren bajar los aportes nacionales desde 1,16% a 1%, como forma de reducir el monto global del presupuesto del bloque. Esto implica recortes y reestructuras que no todos están dispuestos a ejecutar.
Además de este panorama, de por sí complejo, el Consejo Europeo intentará al mismo tiempo laudar la forma y las condiciones para acceder al fondo de 750.000 millones de euros para reactivar las economías y mitigar el impacto social provocado por la pandemia de COVID-19.
"Eso lo enturbia todo", sintetizó Hernández al mencionar las negociaciones paralelas que se estarán dando en Bruselas.
De la mano de Angela
La académica de la Universidad Diego Portales consideró que a pesar de la complejidad del panorama, Alemania presentará "una buena propuesta" que buscará los equilibrios.
"La embajadora de la UE en Chile dijo que por lo menos hay un cierto acuerdo que se ha puesto sobre la mesa en cuatro meses, mientras que en la crisis (financiera de 2008) para solucionar el problema griego de la deuda tardaron cuatro años", aseguró la entrevistada.
Hernández consideró que "Alemania depende del mercado europeo", a diferencia de otros miembros comunitarios que "comercian más afuera". Por eso, "le interesa que le vaya bien a España, Italia, Portugal, etcétera. Es un buen síntoma que Alemania tenga la presidencia en este momento de la UE y que sea la que lidera estas negociaciones".