"El noreste de Siria actualmente es objeto de debate entre las fuerzas kurdas, Estados Unidos, Rusia, Turquía y el régimen sirio; entendemos la preocupación de Turquía sobre seguridad, pero también creemos que se lo puede resolver solo en caso de la preservación de la soberanía y la integridad territorial de Siria", dijo el comisario de Política Europea de Vecindad.
Entre Estados Unidos y Turquía existen serias diferencias sobre Siria, en particular, sobre la decisión del presidente norteamericano Donald Trump de retirar las tropas estadounidenses del país árabe tras la derrota sobre los terroristas.
Washington insiste en que Ankara no debe atacar a las fuerzas aliadas de EEUU, que consisten principalmente de kurdos, mientras que Turquía ve en estas formaciones una amenaza para su seguridad.
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La oficina del Presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, informó anteriormente que está buscando opciones para crear una zona de seguridad conjunta con Estados Unidos en el noreste de Siria.
"Siria ha entrado en una nueva fase después de que Estados Unidos anunciase el retiro de las Fuerzas, pero no hay una solución política en el país; debe quedar claro que la única opción es una decisión negociada bajo los auspicios de las Naciones Unidas; no nos cansaremos de repetirlo", reiteró el comisario europeo.
Además, Hahn expresó la preocupación de la UE por el aumento de los grupos terroristas en Siria.
El "único momento positivo", según el comisario europeo, fue el suministro humanitario reciente al campamento de refugiados Rukban en la frontera con Jordania, donde se encuentran 60.000 sirios, incluidos mujeres y niños.
Asimismo, Hahn declaró que la UE no se sumará a la reconstrucción de posguerra de Siria hasta que no se lance el proceso de transición política.
Hahn afirmó además que, según la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), en Siria todavía no se han creado las condiciones necesarias para un retorno seguro de los refugiados.
El 6 de febrero, la policía militar de las Fuerzas Armadas rusas garantizó la seguridad del convoy de la ONU de Damasco a Rukban.
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Trump urgió a mediados de enero el establecimiento de una zona de seguridad de unos 30 kilómetros en la zona norte de Siria fronteriza con Turquía y amenazó al país otomano con sanciones económicas si atacaba a las milicias kurdas.
Erdogan expresó su acuerdo con esta idea, mientras que Turquía con el apoyo de sus aliados la controle.