La situación entera es "un precedente peligroso" respecto a las agencias internacionales, que "no debe pasar desapercibido", valora Mona Abdelhadhi, fundadora del Observatorio egipcio de la Libertad de Medios.
"Se debe organizar una investigación internacional y exigir responsabilidad a quienes irrumpieron en la oficina de RIA Novosti Ukraina y también a quien dio la respectiva orden", según la periodista.
Asimismo, es Ucrania la que pagará por sus acciones, ya que "la persecución de los periodistas se hace conocida por todo el mundo, con todas las consecuencias para la confianza en el Estado responsable", opinó.
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Por su parte, la razón general para los ataques contra los medios rusos en diferentes países del mundo, sobre todo en las naciones occidentales y sus aliados, sería su visión diferente de los hechos.
"Los medios rusos se ven acosados en muchos países por transmitir puntos de vista distintos. Eso contradice la política de los grandes consorcios mediáticos que ofrecen a sus audiencias una interpretación univoca", concluyó la periodista.
Primero, Ucrania "se posiciona como un país amante de la libertad", pero resulta que allá hay cada vez menos democracia.
Segundo, la reacción de EEUU, que suele "injerir en los asuntos de otros Estados bajo pretextos de 'proteger la libertad', por ejemplo la libertad de opinión", en este caso fue casi nula: "unos comentarios verbales, todos a favor de Ucrania", destacó el interlocutor de Sputnik.
"Rusia tiene que llevar el asunto a la ONU para investigar la detención del periodista y el ataque contra RIA Novosti Ukraina, escalar el asunto de unas medidas de seguridad a una investigación internacional sobre la protección de las libertades", sugirió Abdel Dahab.
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El jefe del portal RIA Novosti Ukraina, Kiril Vishinski, acusado de alta traición y de haber apoyado a las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk (RPD y RPL), fue arrestado el 15 de mayo por el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU, por sus siglas en ucraniano).
Los altos cargos y jefes de los medios rusos condenaron las acciones de Ucrania y exigieron la liberación del periodista.
