"No queremos estropear las relaciones con ningún país, incluida Alemania, pero daremos una respuesta adecuada a las acciones inamistosas de Alemania", dijo el jefe de la diplomacia turca en una rueda de prensa en Estambul.
"Hoy iré a Hamburgo, y esta misma tarde sostendré un encuentro con nuestros ciudadanos, nadie podrá impedirlo", subrayó el canciller turco.
El diplomático resaltó que "la libertad de reuniones es democracia", y precisamente ese valor representa la piedra angular de los valores europeos.
Según Cavusoglu, actualmente las autoridades alemanas son víctimas de los "partidos racistas".
Como consecuencia Bozdag se negó a reunirse con su homólogo alemán, Heiko Maas, y abandonó Alemania.
En Alemania viven cerca de 1.410.000 ciudadanos de Turquía, que tienen derecho a votar en dicho referendo que se celebrará en su país de origen el 16 de abril.
La canciller alemana, Angela Merkel, exigió que Ankara lo excarcele y respete la libertad de expresión.
El domingo pasado, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, comparó la política actual de Berlín con "las acciones de los nazis", lo que provocó fuertes críticas por parte de Alemania.
