Tan solo 27.000 migrantes de 57.000 abandonaron Alemania en 2018. En la mayor parte de los casos, los individuos simplemente no llevaban consigo sus documentos, reveló a Sputnik el portavoz del Ministerio del Interior de Alemania, Steve Alter.
El portavoz recordó que el 25 de febrero, el exjuez Harald Dorig, del Tribunal Administrativo Federal, citó otro vericueto legal durante el programa de televisión 'Hart aber fair' (Duro pero Justo, en español).
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Si un refugiado confiesa que anteriormente era un terrorista del ISIS o miembro de otra organización yihadista, en el caso del regreso a su país correrá peligro de ser torturado o condenado a muerte.
Steve Alter considera que los agentes del orden de Alemania no pueden con la carga que recae sobre ellos. Mientras, el país no cuenta con las plazas suficientes para los futuros deportados.
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A este respecto, el interlocutor de Sputnik comparó la política llevada a cabo en Austria respecto a la retención de migrantes con la que existe en Alemania. Hoy en día, el país germano tiene requisitos muy complicados para realizar la retención de los indocumentados.
El proyecto de ley propuesto por el ministro del Interior de Alemania, Horst Seehofer, fue elaborado para cambiar esta situación. Además, esta iniciativa determina premisas para endurecer medidas respecto a los delincuentes que no pueden ser deportados del país por una serie de razones: limitación de la libertad de sus movimientos, obligación de aparecer regularmente en la policía o llevar pulseras localizadoras electrónicas.
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