"Los derechos y las libertades garantizadas por la Convención Europea de Derechos Humanos y la supremacía de ley se deben cumplir en Turquía como en todos los países miembros del Consejo de Europa, continuaremos nuestra cooperación duradera en esta dirección", dijo Jagland en un comunicado.
Saludó la liberación de Kilic al indicar que "los defensores de derechos desempeñan un rol fundamental en la democracia y en la sociedad civil" y "deben trabajar libremente, sin injerencia arbitraria".
En julio de 2017, otros once defensores de derechos humanos, entre ellos la directora de AI en Turquía, Idil Eser, fueron detenidos cerca Estambul durante una conferencia en uno de los hoteles en la isla de Buyukada.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, acusó a los activistas de preparar una nueva intentona golpista en el país.
Eser y sus siete colegas, incluido el alemán Peter Steudtner, fueron arrestados.
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En octubre pasado, un tribunal de Estambul liberó a ocho activistas bajo la obligación de no abandonar el país hasta que termine la investigación.
