"El Gobierno catalán no mirará hacia otro lado si un funcionario no hiciera caso de las leyes que están vigentes", afirmó Puigdemont durante la sesión de control al Ejecutivo autonómico en el Parlamento catalán.
"En el momento que tengamos la ley de transitoriedad jurídica, ello obligará a todos los funcionarios que trabajan y viven en Cataluña", explicó Llach, haciendo hincapié en que "quien no la cumpla será sancionado".
El líder del conservador Partido Popular en Cataluña, Xavier García Albiol, reprochó al Gobierno catalán sus intenciones ya que, a su modo de ver, las leyes de desconexión son "antidemocráticas" y representan "un golpe de Estado literal".
"Presentar que se vote como un golpe de Estado es un poco raro", replicó Puigdemont.
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Además, el presidente catalán defendió a Llach de las críticas de los conservadores recordando que el actual parlamentario de Junts Pel Sí fue un cantautor "víctima de la represión la censura y el exilio por parte de la gente de la dictadura", gente que después "fue miembro" del Partido Popular.
