"Podemos constatar cierto efecto [de las sanciones], el más grave de los cuales es el aumento de los precios de aluminio por la situación en Brasil, y en particular por los acontecimientos en torno a Rusal", dijo.
"Parece que a finales del año nos enfrentaremos a un déficit de la oferta, tal y como lo pronosticamos, y los precios se mantendrán en el nivel actual, entre 2.000 y 2.100" dólares por tonelada, sugirió.
Según el director de Ma'aden, la situación en el mercado de aluminio en 2019 dependerá de las decisiones de China.
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Mientras la situación en torno a Rusal, opinó, "se resolverá de manera que no afecte sustancialmente el mercado (…) y 2019 será el mismo que este".
Preguntado sobre la posibilidad de crear una plataforma como la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para controlar el mercado de aluminio, Devis se mostró escéptico.
"No creo que funcione, porque el mercado [de aluminio] es representado por numerosos actores con objetivos distintos", explicó.
Sin embargo, según Devis, "sería útil tener una plataforma en que los grandes productores podrían por lo menos discutir el futuro del mercado (…), lo que lo haría más estable".
Estas sanciones significan el bloqueo de activos en EEUU y la prohibición de establecer relaciones de negocios con estas empresas.
Las restricciones a la empresa rusa la forzaron, en agosto pasado, a suspender la producción en su planta de aluminio Nadvoitski, en la República rusa de Karelia, que antes producía solo para exportaciones a Estados Unidos.
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Según comunicaron entonces a Sputnik fuentes cercanas a la empresa rusa, Rusal podría parar la producción en la mayoría de sus plantas.