"Luego de la suspensión de sus obligaciones bajo el Tratado INF en febrero de 2019, el Departamento comenzó actividades de diseño conceptual de misiles crucero lanzados desde tierra y sistemas de misiles balísticos", señaló el funcionario, añadiendo que el desarrollo se encuentra en las etapas iniciales y "tomará años antes de que el sistema operacional esté pronto para su despliegue".
El Pentágono informó el 19 de agosto que realizó el 18 de agosto un ensayo de vuelo de un misil crucero convencional lanzado desde tierra, que dio en su objetivo tras volar más de 500 kilómetros.
El 2 de agosto, Washington rompió definitivamente el Tratado INF (Tratado de Eliminación de Misiles de Corto y Medio Alcance) que prohibía el despliegue de misiles de crucero con alcance de entre 500 y 5.500 kilómetros.
Rusia anunció la suspensión de su compromiso con el Tratado INF, pero al mismo tiempo declaró que Moscú no desea implicarse en una carrera armamentista, mantiene sus propuestas de desarme y esperará a que EEUU esté dispuesto a entablar conversaciones al respecto.
A principios de febrero pasado, el Ministerio ruso de Defensa publicó imágenes satelitales de una planta de la compañía estadounidense Raytheon, en Arizona, en la que desde hace dos años se llevan a cabo los trabajos para fabricar misiles de medio alcance proscritos por el Tratado INF.
El Ministerio ruso desveló también que ya en noviembre de 2017 el Congreso de EEUU asignó al Pentágono el primer monto de 58 millones de dólares para el desarrollo de un misil prohibido.