Esta declaración coincidió con el segundo aniversario del incidente de ataque químico de Jan Sheijun y la cercanía del primer aniversario del de Duma, cuya responsabilidad adjudican al presidente sirio, Bashar Asad.
Sus autores señalan que "no puede ponerse en tela de juicio el repetido uso que hizo este régimen de estas armas contra su población".
A su juicio, las autoridades sirias pudieron evitar el castigo inmediato debido al cese del funcionamiento del mecanismo de investigación independiente.
"Los Estados con sentido de responsabilidad reiteran su apego al acatamiento de la prohibición del uso de armas químicas y a la lucha contra la impunidad de los que lo hacen o lo encubren", señalaron París, Londres y Washington.
Además informaron que la comisión investigadora de la Organización de Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) está trabajando para identificar a los culpables.
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EEUU y sus aliados usaron los acontecimientos en Jan Sheijun y Duma como pretexto para atacar con misiles a Siria antes de cualquier investigación.
Las autoridades sirias declararon que jamás usaron armas químicas contra civiles ni terroristas y que todo el arsenal de agentes tóxicos fue retirado del país bajo control de la OPAQ.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia declaró que el objetivo de los inventos sobre el uso de agentes químicos por el Ejército sirio consiste en disculpar a los terroristas y justificar posibles ataques contra Siria.
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El Estado Mayor General de las FFAA de Rusia señaló que en marzo de 2018 había informado que elementos radicales estaban preparando en Guta Oriental, donde está Duma, un montaje para simular el uso de armas químicas por el Ejército de Siria.
