La OTAN aboga por una modernización de la alianza frente al ascenso ruso y chino

BERLÍN (Sputnik) — La modernización de la OTAN es necesaria frente al desarrollo de Rusia y China, declaró el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.

"La OTAN no puede permitirse el lujo de concentrarse en una amenaza, debemos observarlo todo al mismo tiempo: el ascenso de Rusia y China, respectivamente (…) así que tenemos que trabajar con los norteamericanos, tenemos que modernizar nuestra alianza, y estamos haciéndolo", dijo Stoltenberg durante un discurso, transmitido por el canal BILD TV.

El secretario general de la OTAN también señaló como amenazas para el bloque militar los ataques cibernéticos, Corea del Norte y la proliferación de armas nucleares.

Ademas, destacó que la OTAN está invirtiendo más en ciberprotección y en nuevas tecnologías modernas. Stoltenberg también celebró el aumento del gasto en defensa de Alemania.

"Celebramos que el tratado de coalición del nuevo Gobierno [alemán] tiene una declaración sobre un aumento correspondiente en el gasto en defensa, que el Bundeswehr [fuerzas armadas de Alemania] debe estar bien armado", comentó.

Ucrania y los países occidentales dicen estar preocupados por la supuesta intensificación de la actividad militar rusa cerca de la frontera ucraniana, que interpretan como preparativos para una posible invasión.

Rusia rechaza esas sospechas y acusa a la OTAN de incrementar la actividad militar cerca de sus fronteras, viendo en ella una amenaza para su seguridad nacional. También defiende el derecho a mover fuerzas dentro de su propio territorio según lo estime conveniente.

A finales de 2021, el Ministerio de Exteriores de Rusia publicó sus propuestas para Estados Unidos y la OTAN sobre las garantías de seguridad en Europa en las que, en particular, se plantea a los países de la Alianza Atlántica comprometerse a contener la ampliación del bloque y excluir la adhesión de las exrepúblicas soviéticas, en especial Ucrania.

El tema centró las negociaciones de EEUU y Rusia en Ginebra, los días 9 y 10 de enero, y la reunión del Consejo OTAN-Rusia que se celebró en Bruselas el día 12, así como se debatió el 13 de enero en una sesión del Consejo Permanente de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa en Viena.