España suma 14.581 nuevos contagios y baja la incidencia de 500 por primera vez en un mes

MADRID (Sputnik) — El Ministerio de Sanidad de España notificó el diagnóstico de otros 14.581 casos de COVID-19, lo que mantiene la tendencia decreciente de los contagios, aunque la tercera oleada del virus sigue cobrándose un precio muy alto en vidas, con 530 nuevas muertes

Con esta actualización de datos, España suma ya un total de 3.056.035 casos confirmados del COVID-19 desde el inicio de la pandemia, de los que 64.747 tuvieron un desenlace fatal.

El descenso de los contagios se deja notar en la incidencia acumulada (los casos por 100.000 habitantes en 14 días), indicador que baja hasta los 496 este 12 de febrero, situándose por debajo de 500 por primera vez en más de un mes.

En cualquier caso, la incidencia sigue muy por encima del umbral de 250 que el Ministerio de Sanidad utiliza para declarar el escenario de riesgo por coronavirus.

Por ello, las autoridades sanitarias insistieron en las últimas horas en la necesidad de no bajar la guardia pese a la mejoría de la situación.

"No estamos en un lugar seguro: la transmisión sigue siendo muy alta", dijo en rueda de prensa el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón.

Además, el sistema asistencial sigue sometido a una alta presión, con 22.311 pacientes del COVID-19 ingresados en los hospitales públicos del país, lo que mantiene ocupadas el 17,36% de las camas.

De esos pacientes, un total de 4.350 necesitan cuidados intensivos, lo que mantiene ocupadas el 39,78% de las camas UCI del sistema de salud.

España está desde el 25 de octubre bajo un estado de alarma que permite a las regiones del país aplicar medidas restrictivas de la movilidad y la actividad social (toques de queda nocturno, limitación de reuniones, cierres perimetrales o clausura de bares) en función de la situación en cada territorio.

La tercera oleada de contagios hizo que las distintas comunidades autónomas se acogieran a estas medidas para contener al virus, imponiendo las restricciones más duras desde el confinamiento de marzo.

El descenso de los contagios en las últimas jornadas abrió el debate sobre una posible desescalada de estas medidas. Varias comunidades anunciaron una tímida relajación de algunas restricciones, pero la mayor parte del país sigue sometido a fuertes limitaciones.

Por ejemplo, Castilla-La Mancha o Extremadura reabrieron su hostelería, el País Vasco restableció la libertad de movilidad entre municipios y Madrid anunció que retrasará el inicio del toque de queda hasta las 23.00 si la situación epidemiológica sigue la tendencia actual.

La OMS lanzó el 11 de febrero una advertencia directa a las autoridades españolas, alertando de que el avance positivo no debe llevar a un levantamiento indiscriminado de las medidas.

"Cada vez que levantamos una restricción y abrimos una parte de nuestra sociedad, el equilibrio cambia en favor del virus", afirmó Catherine Smallwood, responsable de emergencias de la OMS, quien llamó a plantear el levantamiento de medidas "con mucho cuidado" y "en base a criterios epidemiológicos muy claros y objetivos".