"Un profesional de la medicina de nacionalidad colombiana, delinquió de manera aviesa (…), gente que no entiende lo que es la ética profesional, y se aprovechan de personas que están entre la vida y la muerte (…) frente a una enfermedad tan cruel como la del COVID-19, y se dedica junto a otros cómplices a vender medicinas", indicó el fiscal general Tarek William Saab.
#Video Así vendía los medicamentos contra el #Covid_19 el médico Antonio Amell a familiares de enfermos en el Hospital de Valencia, Carabobo pic.twitter.com/Xg4H9NgUe8
— La Tabla (@latablablog) September 9, 2020
El funcionario calificó como insólito que la Cancillería de Colombia pretenda defender al médico Antonio José Amell Castillo, y tildar su detención arbitraria, tras las evidencias que comprueban su participación en una presunta red dedicada a lucrarse con la venta de medicamentos distribuidos en hospitales de manera gratuita.
"Es insólito que una cancillería salga en defensa del sujeto, que incluso, vamos a investigar cómo llegó acá, él podría ser un doble agente, podría estar infiltrado para ocasionar ese tipo de daño, no podría ser eso descartable", agregó.
Amell, quien ejercía como residente de medicina interna en la Ciudad Hospitalaria Enrique Tejera del estado Carabobo (norte), detalló el fiscal, se dedicaba a captar familiares y tras asegurarles que el hospital no contaba con los insumos médicos necesarios, les ofrecía hasta en 800 dólares cada ampolla de Remdesivir.
Además, fue detenida Francis Margarita Aguiar Salazar, señalada como su cómplice, y quien trabaja en un comercio cercano al hospital, donde se incautaron planillas y formularios de documentos; los cuales eran utilizados en la administración de servicios médicos del referido centro de salud.
El fiscal indicó que a Amell se le imputa por concusión, contrabando de extracción y asociación para delinquir, y Francis Aguiar los delitos de forjamiento de documentos públicos, contrabando de extracción y asociación para delinquir.
Por su parte, la Cancillería de Colombia rechazó la detención del médico y exigió el pleno respeto de su vida e integridad física.
Detención de personas que cobraban para ingreso al país
Además, la Fiscalía General de Venezuela informó que detuvo a 12 sujetos acusados de integrar una red criminal que cobraba hasta 1.800 dólares a ciudadanos por traslados desde la ciudad estadounidense de Miami hasta la nación caribeña, burlando las restricciones que se establecieron desde marzo para ingresar al país.
El funcionario detalló que estas personas realizaban promociones por las redes sociales, en las que ofrecían un paquete de viaje que incluía: hospedaje, traslados, alimentación, salvoconductos y pruebas rápidas de COVID-19.
Desde marzo, los vuelos comerciales están suspendidos en Venezuela y el ingreso se admite únicamente por traslados aéreos humanitarios, o a través de las fronteras terrestres, pero previo a volver a sus hogares las personas deben cumplir por 17 días una cuarentena obligatoria en centros dispuestos por el Gobierno.
De acuerdo con lo indicado por el fiscal, estas personas ofrecían el traslado desde Estados Unidos hasta Brasil, pasando una noche en la ciudad de Boa Vista, en el estado brasilero de Roraima, y posteriormente ingresando a Venezuela sin cumplir con el requisito de la cuarentena obligatoria.
Entre los aprehendidos se encuentran cuatro funcionarios entre médicos y trabajadores de la alcaldía de Santa Elena de Uairén, en el sur del estado Bolívar (sur), a quienes se les imputan los delitos de corrupción propia, obtención ilegal de lucro, tráfico ilegal de personas y asociación para delinquir.