Hizbulá, respaldado por Irán, había dicho previamente que un dron de reconocimiento israelí había sobrevolado el sur de la capital libanesa antes de estrellarse y que un segundo avión no tripulado había "atacado un área específica" antes del amanecer del 25 de agosto.
Pero después de que los "expertos desmantelaran el primer avión no tripulado que se estrelló en los suburbios del sur de Beirut, se descubrió que contenía un dispositivo explosivo sellado", señaló Hizbulá en un comunicado.
"Confirmamos que el propósito de este primer avión no tripulado no era el reconocimiento sino efectuar un ataque con bombas", agregó la nota.
Las fotos de los aparatos que publicaron medios libaneses muestran drones con un alcance muy limitado que el Ejército israelí no suele usar para operaciones de reconocimiento o ataques en feudos de Hizbulá.
El Ejército israelí no confirmó ni desmintió las acusaciones y se limitó a decir que no comentaba "informaciones de medios extranjeros", en referencia a los libaneses que informaron en primer lugar del tema.