"Según la información recibida por la CIDH, desde el 18 de abril en el país hubo, al menos, 76 personas muertas, 868 resultaron heridas, en su gran mayoría en el contexto de las protestas, de estas últimas, cinco permanecen en hospitales en estado de gravedad", indica el texto de prensa.
"La Comisión urge enérgicamente al Estado a investigar diligentemente estos hechos, juzgar y sancionar a sus responsables y reparar a las víctimas de violaciones a derechos humanos", añade el texto de prensa.
Las manifestaciones estallaron contra la reforma del Gobierno al sistema previsional, pero continuaron a pesar de que el presidente Daniel Ortega dio marcha atrás con el decreto.
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La CIDH, que forma parte del sistema interamericano de derechos humanos de la Organización de los Estados Americanos (OEA), culminó una visita de trabajo a Nicaragua, que comenzó el 17 de este mes.
En sus observaciones preliminares, indica que 438 personas fueron detenidas, entre estudiantes, población civil, defensoras y defensores de derechos humanos y periodistas.
Con el objetivo de observar en el terreno de manera preliminar la situación de los derechos humanos en el país, en relación con los hechos violentos ocurridos desde el 18 de abril, la CIDH trabajó en tres equipos que visitaron cuatro ciudades, instalaciones estatales, centros de salud, hospitales, el Instituto de Medicina Legal y centros de detención.
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La CIDH reunió información documental, audiovisual y escuchó centenares de testimonios que "evidencian graves violaciones de derechos humanos durante un mes de protestas, caracterizadas por el uso excesivo de la fuerza por parte de cuerpos de seguridad del Estado y de terceros armados", se lee en el comunicado.
El organismo "condena enfáticamente" las muertes, agresiones y detenciones arbitrarias de los estudiantes, manifestantes, periodistas y otros ciudadanos que se han registrado en el país desde el comienzo de las protestas y que continúan hasta la fecha", dice el comunicado.
De igual forma, la CIDH condena las muertes de dos policías y agresiones contra otros funcionarios públicos producidas en este contexto, añade el comunicado.
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La visita de la Comisión era una de las condiciones que puso la Conferencia Episcopal para interceder en el diálogo nacional convocado por el presidente Ortega y apoyado por la Iglesia Católica.
El tema central del diálogo entre el Gobierno y los opositores, que comenzó el 16 de este mes, es el rol de la policía y la represión de las protestas.
