La ley polaca aprobada el pasado 22 de junio prevé el desmantelamiento de los monumentos a los soldados soviéticos que ofrendaron su vida para liberar a Polonia del yugo alemán en 1945.
Los senadores rusos criticaron también la fecha que eligieron los diputados polacos para aprobar la normativa y es que ese día Rusia conmemora el comienzo de lo que se conoce como la Gran Guerra Patria (1941-1945) en la que más de 26 millones de soviéticos perdieron la vida.
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"El presidente polaco, Andrzej Duda, promulgó el 17 de julio de 2017 la ley que entra en vigor dentro de tres meses y eso significa que casi 500 monumentos están condenados a ser desmantelados y destruidos", subrayó el Senado ruso.
"No se debe olvidar que gracias a la victoria sobre el fascismo, una victoria en la que el papel de la Unión Soviética fue crucial, Polonia se mantuvo como un Estado y el pueblo polaco no fue exterminado o desterrado", remarcaron los senadores rusos.
La ley polaca también ha sido cuestionada por el Parlamento de Israel que pidió al mundo entero condenar la profanación de los monumentos a los soldados del Ejército Rojo soviético y a las víctimas del Holocausto.