El periódico revela que la bomba podría haber sido fabricada con peróxido de hidrógeno en la "mesa de cocina" de Abedi.
Según la publicación, los investigadores están cerca de identificar el lugar donde fue hecho el artefacto explosivo, sin embargo aún se teme que los cómplices del kamikaze puedan andar sueltos.
El atentado se produjo en la noche del 22 de mayo en el estadio Manchester Arena a la salida del concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande.
Según los últimos datos, el ataque se saldó con 22 muertos, incluidos 12 niños.
Varias personas se consideran desaparecidas, otras 75 siguen hospitalizadas, de ellas 23 en estado crítico.
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La autoría del atentado fue asumida por Daesh, organización terrorista que se autodenomina Estado Islámico y que está prohibida en muchos países, entre los que se encuentra Rusia.