El jefe de la diplomacia española opinó que "recoger a toda esta gente que está huyendo desesperada" en campos de refugiados y concederle el derecho de asilo, un derecho "no negociable", conlleva un problema: "distinguir" a quién dar este derecho.
Margallo se planteó la duda de si todos los que llegan de Siria o Eritrea "están siendo perseguido" o si se van de sus países "por otros motivos".
Y se preguntó por qué no piden asilo desde otros países que también están en conflicto.
Los centros de acogida harán una "criba" e intentarán "detectar quién puede ser yihadista".
"Por supuesto que la inmensa mayoría no lo son", puntualizó, pero, insistió en que no se puede descartar que puedan intentar entrar en España como refugiados.
E ironizó con que el fenómeno yihadista es el "más anacrónico" porque quieren establecer "un califato del siglo XI con los medios más modernos del mundo".
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ven poco probable que terroristas del Estado Islámico entren en Europa infiltrados entre los refugiados sirios, "ven más viable que el Estado Islámico utilice métodos de entrada más habituales como pueden ser los aeropuertos", señalaron esta semana fuentes policiales a la Cadena Ser.
También la portavoz del Gobierno de Mariano Rajoy, Soraya Sáenz de Santamaría, descartó ayer tajantemente esta posibilidad al asegurar, tras la reunión del Consejo de Ministros, que los refugiados son personas que precisamente huyen de ese terrorismo.
POLITICA DE ASILO
Otra de las soluciones es "ir a la raíz del problema" por lo que reclamó un "alto el fuego inmediato" en Siria para que la ayuda humanitaria llegue a los desplazados y acabar con los grupos terroristas Al Nusra y Daesh.
El canciller pidió negociar con Bashar Asad, aunque esta opción no le "gusta nada", para poner "en marcha una transición democrática" en la que la oposición pueda "organizarse", líder sirio tenga una "salida personal" y acepte que no formará parte de la "solución" siria y para que los alauitas, que apoyan a Asad, puedan tener garantizado "un sitio en la nueva Siria".