La organización yihadista Estado Islámico (EI) se atribuyó el primer atentado el domingo contra la representación de Corea del Sur, en el que murieron dos personas.
El canciller recordó, ante los periodistas en Madrid, que la sede española en Libia ya había sido totalmente evacuada en julio del año pasado.
"Se pudo hacer en tres etapas y con enorme rapidez", destacó Margallo.
La explosión se pudo oír en todo el barrio de Ben Achour, destruyó dos vehículos aparcados en la zona y resquebrajó el muro que rodea la embajada.
Éste es el tercer atentado de este tipo desde el domingo: el primero fue ante la embajada de Corea del Sur, con dos vigilantes muertos; el segundo, ante la sede marroquí; y el último ante la legación española.
La rama libia del EI se atribuyó los dos primeros atentados.
El domingo pasado, León avanzó en la población marroquí de Sjirat que el Parlamento libio instalado en Tobruk, que tiene el reconocimiento de la comunidad internacional, y la asamblea de Trípoli, apoyada por un grupo de milicias islamistas moderadas, han superado ya el 80% de sus divergencias.
Desde la caída de Muamar al Gadafi, Libia ha degenerado en un Estado fallido, roto por las luchas entre los diferentes clanes del país que luchan por el petróleo, el tráfico de personas, las armas y las drogas.
En esta atmósfera se han hecho fuerte movimientos yihadistas leales al EI.
Esta misma semana, grupos yihadistas ejecutaron en algún punto de Libia a 30 cristianos etíopes.