Los acusados estuvieron involucrados en el envío de al menos una treintena que llegaron a países como Mali, Siria o Libia para su integración en Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), Daesh o Jabaht Al Nusra.
"A otros cuatro acusados que reconocieron los hechos –Paul Audren Lawrence Cadic, Sylvain Bertrand Guillaume Decker, Farid Cheikh y Davide de Angelis— la Sala les condena a seis años por el mismo delito y atenuante", señala el auto.
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En el caso de Chafik Jalel Ben Amara Elmedjeri, único de los acusados que no alcanzó una conformidad con la Fiscalía, el Tribunal le condena a cinco años y seis meses de prisión por colaboración con organización terrorista.
El promotor, director y coordinador de esta organización era Mustafá Maya Amaya, "quien se erigió en su líder y dinamizador y quien mantenía permanente comunicación con musulmanes europeos, asentados principalmente en Francia, a los que captaba por Internet para su desplazamiento a las zonas de actuación de las citadas organizaciones terroristas", señala el auto.
"La función de Maya Amaya era esencial para los fines de la organización, toda vez que, una vez efectuada la captación por internet, ponía en contacto a los nuevos voluntarios con los "facilitadores" y, a su vez, estos con los "pasadores", conforme a las funciones señaladas anteriormente", relata la Sala.
