"Sus aseveraciones de que están interesados en bajar las tensiones y prevenir los incidentes bélicos peligrosos no se confirman por acciones reales para reanudar los contactos normales de trabajo con Rusia sobre las cuestiones militares", dice el texto.
Asimismo, subraya que "la política destructiva de sanciones y ultimátums aplicada por los Estados miembros de la OTAN es un camino a ninguna parte" porque amenaza la seguridad global y socava el derecho internacional.
Además, el Senado ruso indicó que la OTAN trata de sustituir "el mundo apoyado en las normas universales del derecho internacional acordadas sobre la base de un consenso" por sus propias reglas, lo que "provoca los innumerables crisis y conflictos en varias regiones del planeta".\
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La declaración recuerda en particular que las operaciones militares de muchos miembros de la Alianza Atlántica en Afganistán y Libia no contribuyeron a la resolución de los conflictos en estos países, sino provocaron el caos y múltiples víctimas.
Al mismo tiempo, los senadores mencionaron que Rusia y la OTAN podrían juntas hacer frente a las numerosas amenazas comunes.
"Tenemos muchos temas importantes para discutir, así como un número significativo de amenazas comunes que requieren de una respuesta conjunta", indica el documento al enfatizar que cualquier contacto entre la OTAN y Moscú se debe basar en el respeto mutuo de los intereses de ambas partes y en el rechazo a los ultimátums.
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El Consejo de la Federación expresó también su preocupación por las acusaciones infundadas de EEUU contra Rusia en combinación con el apoyo incondicional de otros Estados de la OTAN, lo que socava la estabilidad estratégica y la seguridad global.
