Haass ha sido beatificado por la Iglesia católica en una ceremonia que ha tenido lugar en la Catedral de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María de Moscú, perteneciente a la Arquidiócesis de la Madre de Dios en Moscú.
Haass nació cerca de Colonia, Alemania, en el seno de una familia católica. En 1806, llegó a Rusia por invitación del príncipe ruso Repin, a quien trató en Viena. Posteriormente, fue nombrado jefe del hospital de Pavlovsk, cerca de San Petersburgo.
En su tiempo libre, Haass trabajaba en hospicios y albergues, tratando a las clases más desfavorecidas. En 1811, tras un viaje al Cáucaso, publicó un extenso trabajo que reveló las propiedades medicinales de las aguas, en su mayoría carbonatadas, del Cáucaso del Norte, lo que contribuyó al establecimiento de balnearios en la región, entre ellos el de Minerálnye Vodi.
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En 1825, después de vivir varios años en Alemania, Haass regresó nuevamente a Rusia, en donde cambió su nombre —Friedrich Joseph— y se convirtió en Fiódor Petrovich. Más tarde, fue nombrado médico jefe de las prisiones de Moscú.
Es más, inventó grilletes de un nuevo tipo, más livianos y recubiertos con cuero. El 'doctor santo' gastó todo su dinero en aliviar la situación de los enfermos y prisioneros.
En 1832, gracias a sus esfuerzos, se inauguró el primer hospital penitenciario de Rusia y, en 1836, una escuela para los hijos de los prisioneros.
Haass murió el 16 de agosto de 1853 en Moscú. Está enterrado en el cementerio de Vedenskoye y su tumba es una de las más veneradas. Es visitada por los exconvictos y aquellos que han sufridos condenas injustamente.