"Instamos a todas las partes involucradas, sobre todo a EEUU y Corea del Norte, a abstenerse de cualquier paso que pueda provocar ulterior escalada del enfrentamiento, e inmediatamente proceder a un trabajo conjunto para la solución política y diplomática de todo el abanico de problemas en torno a la península de Corea", dijo.
"Estamos convencidos de que esta demostración de fuerza no contribuye a la distensión sino que, al contrario, conlleva las consecuencias más graves para la situación en la región", dijo Zajárova.
Corea del Norte está trabajando activamente para impulsar su programa nuclear y de misiles.
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En 2017, realizó una quincena de pruebas de proyectiles balísticos, incluyendo misiles intercontinentales capaces de alcanzar el territorio de EEUU, y el sexto ensayo nuclear —el de una bomba de hidrógeno para ser colocada en misiles intercontinentales— a pesar de que las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU le prohíben desarrollar tales actividades.
