"La única solución para nosotros es que Karabaj esté fuera de Azerbaiyán", dijo Sargsián tras reunirse con su homólogo azerbaiyano, Ilham Aliyev.
Agregó que las partes "acordaron tomar medidas para disminuir todavía más la tensión y evitar nuevas víctimas en la línea del frente".
El 10 de octubre el portavoz de la presidencia armenia, Vladímir Akopián, declaró que la aceptación del diálogo por parte de Armenia no significa que cambiara su posición sobre la solución de la crisis.
El conflicto entre Ereván y Bakú se desencadenó después de que Nagorno Karabaj, un enclave de población mayoritariamente armenia, decidiera independizarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
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Bakú perdió el control sobre Karabaj y siete distritos adyacentes tras la escalada de las hostilidades entre 1992 y 1994.
Para impulsar una solución negociada del conflicto se instituyó en 1994 el llamado Grupo de Minsk, copresidido por EEUU, Rusia y Francia.
En abril de 2016, la crisis experimentó una escalada tras haber permanecido latente durante más de dos décadas.
Desde aquel entonces se mantiene en la zona un armisticio frágil en el que los bandos del conflicto se acusan regularmente de violarlo.