"Soy su amigo humilde en el Sudeste Asiático", dijo Duterte en una reunión con el secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, celebrada en los márgenes de la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, por sus siglas en inglés) en Manila.
Por su parte, Tillerson recordó que EEUU ayuda a Filipinas a luchar contra los terroristas.
Subrayó que lo más difícil será "crear las condiciones con las cuales no se volverá a repetir esa situación".
Se informó previamente que EEUU entregó al Ejército filipino 992 cohetes, 1.040 propulsores de cohete y tiene previsto todavía suministrar 250 lanzacohetes y 1.000 lanzagranadas como parte de ayuda en la lucha antiterrorista.
El 23 de mayo, la capital de la provincia filipina de Lanao del Sur, Marawi, fue atacada por los yihadistas del grupo Maute.
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Prácticamente todos los habitantes de Marawi, con una población estimada en más de 200.000 personas, fueron realojados a otras áreas o huyeron de los enfrentamientos que causaron más de 460 muertos, entre ellos casi 340 terroristas, 85 militares y unos 40 civiles.
El grupo Maute, vinculado a Abu Sayyaf, busca separar Marawi del resto del país y establecer una provincia del autodenominado Estado Islámico, o Daesh (organización terrorista proscrita en numerosos países, entre ellos Rusia).