"Hoy [el 10 de abril] la Secretaría Técnica de la OPAQ solicitó a la República Árabe Siria que realice los preparativos necesarios para el despliegue [de su misión], lo que coincidió con la solicitud de la República Árabe Siria y la Federación Rusa de investigar las acusaciones del uso de armas químicas en Duma; el equipo se prepara para desplegarse en Siria en breve", dice el comunicado.
Los Cascos Blancos se posicionan como una ONG políticamente neutral y no beligerante, dedicada a la protección de civiles en Siria.
No obstante junto a los vídeos en los que sus voluntarios rescatan a niños de las ruinas, también aparecieron imágenes con los mismos protagonistas uniformados y empuñando las armas; en otras se ve cómo manipulan las filmaciones, maquillando a las víctimas y dictándoles lo que deben declarar ante las cámaras.
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El presidente sirio, Bashar Asad, afirmó incluso que en realidad los Cascos Blancos son parte de la organización terrorista Al Qaeda (prohibida en Rusia).
Varios países, entre ellos EEUU, Francia y Alemania ya se mostraron convencidos de que este ataque tuvo lugar y fue perpetrado por Damasco.
Rusia sostiene que el supuesto empleo de agentes tóxicos en Duma es "un montaje" e insiste en que expertos de la OPAQ lleven a cabo una investigación sobre el terreno.
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Por su parte, Damasco prometió prestar "todo el apoyo necesario" para la labor de la OPAQ.