"Ahora se celebran las consultas entre los tres países garantes para enviar invitaciones a otras partes y países para que se incorporen en el proceso de Astaná", dijo Ansari al comentar un posible aumento del número de observadores.
Agregó que de momento el tema no se ha estudiado en detalle e indicó que Irán propone incluir "varios países vecinos a Siria".
"Hemos recibido las peticiones de ciertas potencias mundiales para participar en el proceso de Astaná", afirmó,
"Más tarde, anunciaremos nuevos miembros que actuarán como observadores del proceso de Astaná", destacó.
Añadió que el Ministerio de Exteriores iraní está seguro de que la crisis en Siria terminará pronto.
"Hemos visto que con los éxitos en el campo de batalla contra los terroristas y también a nivel político, sobre todo, en el proceso de Astaná, este objetivo está cerca, y con la ayuda de otras partes veremos pronto el fin de la crisis siria", destacó.
Subrayó también la importancia de la colaboración entre los tres países garantes, las autoridades sirias, la oposición y los observadores del proceso para acelerar las negociaciones entre las partes en conflicto.
Los resultados de la sexta reunión de las negociaciones sirias en Astaná podrían ser reafirmados en una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, declaró Ansari.
"Si es necesario, algunos documentos aprobados en base del consenso de los tres países garantes (Rusia, Turquía e Irán) podrían ser presentados ante el Consejo de Seguridad de la ONU y firmados como documentos internacionales del Consejo de Seguridad", dijo en una rueda de prensa tras las negociaciones.
El 14 y el 15 de septiembre la capital kazaja, Astaná, acoge la sexta ronda de conversaciones sirias a la que precedió una reunión del grupo de trabajo conjunto de los tres países garantes.
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Durante la reunión se acordó que en la zona de seguridad de Idlib en calidad de observadores de los territorios que controla Damasco habrá representantes de Moscú y Teherán, mientras la oposición siria contará con observadores enviados por Ankara.
Estas zonas de seguridad fueron creadas en mayo para poner fin a los enfrentamientos entre las fuerzas de Damasco y las de la oposición.
Dos semanas después se puso en marcha la segunda zona de distensión en Guta Oriental gracias a un pacto entre representantes del Ministerio ruso de Defensa y de la oposición moderada siria.
A principios de agosto entró en vigor la tercera área, al norte de la ciudad de Homs.