El incidente se produjo después de que fueran a parar a Israel diez misiles desde Siria y de que las fuerzas israelíes bombardearan luego posiciones del Ejército sirio cerca de la frontera entre Siria e Israel y mataran a dos personas, según fuentes sirias.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) señalaron que varios misiles habían caído sobre la parte del territorio sirio de los Altos del Golán que está ocupada por Israel sin causar víctimas ni daños.
Desde que empezó la guerra en Siria en marzo del 2011 es frecuente que se desvíen proyectiles de los combates entre el Ejército sirio y grupos rebeldes a territorio israelí.
El Ejército israelí suele responder bombardeando aunque el fuego procedente de Siria sea fortuito y no intencionado.