El 15 de mayo se informó que un ciudadano turco Ramazan Sahin, de 24 años, fue apuñalado a muerte en una pelea entre varios estambulíes y refugiados de Siria y Afganistán que empezó después de que un grupo de inmigrantes ofendiera a una habitante local.
El medio indica que además de la evacuación de los refugiados a distintas provincias turcas, en Estambul se reforzaron las medidas de seguridad.
Según los datos de la ONU, en Turquía viven unos tres millones de refugiados de Siria.
Para acoger a los inmigrantes, en 10 provincias turcas fueron construidos más de 20 campos especiales, donde se crearon escuelas, centros de asistencia médica y se reparte la comida.
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Sin embargo, la mayoría de los refugiados viven junto con los habitantes locales, lo que a su vez provoca conflictos y enfrentamientos.
