"Aviones militares transportaron efectivos, equipos y bienes del Centro Internacional Antiminas de las Fuerzas Armadas de Rusia desde el aeródromo Chkálovski, a las afueras de Moscú, a la base aérea de Hmeymim, en Siria, después de lo cual el destacamento se trasladó en vehículos a Palmira y procedió al desminado de la ciudad", señala el comunicado.
El contingente incluye un equipo de perros detectores de explosivos.
La misión prioritaria de técnicos rusos será desminar las carreteras que conducen a hospitales y otras infraestructuras sociales, instalaciones de energía eléctrica y suministro de agua, así como el casco histórico de Palmira.
Durante su estancia en Siria, los zapadores rusos probarán por primera vez, además de las herramientas habituales, novedosos modelos de detección de explosivos.
Los yihadistas tomaron el control de Palmira, una de las joyas de la antigüedad, en mayo de 2015.
En marzo de 2016 fueron expulsados por el Ejército sirio con el apoyo de la aviación rusa, pero en diciembre del mismo año reconquistaron la ciudad y destruyeron una parte de sus monumentos.
El 2 de marzo de 2017 las tropas sirias, apoyadas desde el aire por Rusia, recuperaron Palmira.
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En su huida, los terroristas no llegaron a destruir la urbe totalmente.