Este monasterio benedictino ha sido objetivo de ataques de extremistas judíos en numerosas ocasiones, la última, en febrero del 2015.
En las puertas de la iglesia aparecieron esta mañana pintadas en hebreo que decían: "Matad a los cristianos, los enemigos de Israel", "La venganza llegará muy pronto" y "Enviad a los cristianos al infierno", según informaron medios locales.
En febrero del año pasado, extremistas judíos incendiaron un edificio junto al monasterio y en el 2014, quemaron un libro de oraciones dentro de la iglesia, unas horas después de que el papa Francisco oficiara una misa en otro edificio cercano.
En el 2013, extremistas judíos escribieron en hebreo, en la parte externa de la iglesia: "Jesús es un mono" y "Havat Maon", el nombre de un asentamiento judíos en territorio palestino que había sido desmantelado por el Gobierno israelí días antes del ataque.
En el 2012, presuntos radicales judíos pintaron en los muros "Jesús, hijo de puta" y "el precio a pagar", expresión utilizada por los extremistas israelíes para denominar los ataques de carácter nacionalista y religioso.
La Abadía de la Dormición, que se sitúa en el lugar donde la tradición cristiana cree que murió la Virgen María, es propiedad de la Orden Benedictina alemana y está considerada una de las tres iglesias más antiguas de Jerusalén.