"Nuestro objetivo no era matar, queríamos abatir la máquina de guerra del enemigo", dijo Hajizadeh en una rueda de prensa transmitida por la cadena IRIB.
Si Teherán hubiera buscado matar a las personas, habría lanzado una operación que hubiera dejado 5.000 muertos, añadió el oficial iraní.
Según el comandante, al inicio se barajaba atacar la base Al Taji pero tuvieron que rechazarlo porque que se encuentra cerca de Bagdad y está relacionada con las fuerzas iraquíes.
El comandante afirmó que 15 minutos después del ataque a la base Ain al Asad, las fuerzas iraníes llevaron a cabo una operación de lucha radioelectrónica e "inhabilitaron los drones estadounidenses".
De acuerdo con Hajizadeh, ese hecho tuvo "un impacto psicológico" sobre las fuerzas estadounidenses.
"Pese a la gran cantidad de aviones y material bélico que tienen desplegados en torno a la base Ain al Asad, no lograron contrarrestar nuestros misiles", comentó.
Por su parte, el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, declaró que el ataque de misiles balísticos de Irán contra dos bases militares en Irak tuvo la intención de matar estadounidenses.
"Creemos que los misiles balísticos disparados contra las bases estadounidenses en Al Asad y Erbil tenían la intención de matar estadounidenses, tenemos información para apoyar que esa era la intención de los iraníes", declaró Pence a la cadena NBC News.
Pence atribuyó la seguridad de las fuerzas estadounidenses y de la coalición, que resultaron ilesos en el ataque, al "excelente trabajo" de su personal militar en el terreno.
El vicepresidente se manifestó en contra de los informes que afirman que Irán notificó al Gobierno de Irak sobre los ataques, dos horas antes de que sucedieran, y que Irán evitó deliberadamente matar al personal estadounidense en un intento por reducir las tensiones con este país.
El 8 de enero Irán bombardeó instalaciones militares usadas por EEUU en Irak, incluidas la base de Ain al Asad en la provincia de Al Anbar (oeste) y otra en Erbil (norte), en represalia por el asesinato de Soleimaní.
La televisión iraní Press TV afirmó que el bombardeo se saldó con 80 muertos; por su parte, el presidente Donald Trump dijo que ningún estadounidense resultó muerto ni herido en la ofensiva.
Trump, anunció sanciones económicas punitivas adicionales contra Irán, mientras su administración evalúa una respuesta al ataque.
¿Habrá guerra entre EEUU e Irán? Los expertos discrepan https://t.co/YojkWqkwfO
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) January 6, 2020
La embajadora de EEUU ante la ONU, Kelly Craft, envió al Consejo de Seguridad de la ONU una carta en la que subrayó la disponibilidad de Estados Unidos a unas negociaciones con Irán sin condiciones previas, para reducir la tensión en la región.