"Dos asesores militares rusos que estaban dirigiendo el fuego de la artillería siria murieron en el lugar. Cinco efectivos más resultaron heridos y fueron trasladados urgentemente a un hospital militar ruso", dice el comunicado.
Durante el combate, que se prolongó por una hora, fueron abatidos 43 terroristas y destruidos seis vehículos todoterreno equipados con armas de gran calibre.
Rusia se implicó en el conflicto de Siria el 30 de septiembre de 2015, cuando empezó a bombardear las posiciones de grupos terroristas a petición del presidente Bashar Asad, y realizó recortes de su contingente militar en el país árabe en marzo de 2016, así como a principios y finales de 2017.
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Al mismo tiempo, el presidente ruso Vladímir Putin dejó claro que Moscú mantendrá presencia en la base aérea de Hmeymim y en el puerto de Tartus y enviará refuerzos en caso de que los terroristas levanten la cabeza.