Francia propuso la celebración de una conferencia internacional de paz a la que asistan representantes de diversos países para lograr que israelíes y palestinos vuelvan a negociar. Israel rechazó la propuesta, que fue bien acogida por los palestinos.
El jefe del Gobierno francés, que hoy dedica el día a cuestiones económicas y culturales, se reunirá mañana en Jerusalén con Netanyahu y posteriormente se desplazará a Ramala (Cisjordania) para mantener un encuentro con el primer ministro palestino, Rami Hamdala.
Francia anunció hace unos días que había convocado una reunión de ministros de Exteriores de diversos países a la que asistirán el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, y el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, el próximo 3 de junio, a la que no asistirán representantes israelíes ni palestinos.
El plan prevé que en otoño se celebre una segunda conferencia con delegados de Israel y Palestina, aunque de momento, el Gobierno israelí no ha aceptado la invitación.
Las últimas negociaciones entre israelíes y palestinos, impulsadas por EEUU, fracasaron en abril de 2014.
Lieberman vive en un asentamiento israelí en Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel desde 1967.
Valls señaló en una entrevista con el periódico palestino Al Ayyam publicada hoy que la expansión de colonias israelíes en territorio palestino tiene que acabarse.
"El objetivo es llegar a la creación del Estado palestino para que las aspiraciones nacionales (palestinas) se hagan realidad", dijo Valls en la entrevista.
No obstante, recalcó que si la iniciativa de la conferencia de paz fracasa, Francia no reconocerá automáticamente al Estado palestino, extremo que había anunciado el exministro de Exteriores francés Laurent Fabius, pero que ya rectificó el actual jefe de la diplomacia francesa, Jean-Marc Ayrault.