"Seguimos confiando que se garantice la seguridad de los bienes y sobre todo de las personas que trabajan en estas organizaciones financieras", señaló el funcionario ruso.
"Expresamos nuestra incomprensión respecto a la incapacidad o la falta de voluntad de los órganos del orden de Ucrania para impedir que elementos radicales cometan actos vandálicos contra nuestros bancos", denunció.
Rusia observa, según Peskov, "con gran preocupación en qué condiciones les toca trabajar a las filiales de sus organizaciones financieras y crediticias en Ucrania".
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 7 марта 2017 г.
"Consideramos, claro está, que una situación como esta destruye totalmente el clima inversionista en Ucrania, está mostrando a todo el mundo que ahora es peligroso estar allí y pone en duda que sea oportuno trabajar en territorio ucraniano, máxime que resulta simplemente peligro tanto en el plano físico como material", expresó.
"Unívocamente, observamos con gran atención y gran inquietud lo que sucede en Kiev", dijo.
Por otro lado, Peskov evitó dar una respuesta a si el Kremlin recomendaría a Sberbank cerrar sus filiales en Ucrania en caso de que la situación empeorase.
Este lunes radicales ucranianos colocaron bloques de hormigón y sacos de arena en los accesos a la sede de una filial de Sberbank —el mayor banco de Rusia— en Kiev, además de pintar grafitis antirrusos en ese edificio.
Vídeo: Espuma de poliuretano y bloques de hormigón: cómo bloquean Sberbank en Kiev
Los trabajadores del banco enviaron un mensaje al presidente Petró Poroshenko, haciéndole un llamado a poner fin a estos desmanes y tomar medidas para restablecer de modo urgente el funcionamiento de la entidad, una de las instituciones financieras comerciales más importantes de Ucrania.