"La oficina del CICR en Lugansk distribuyó en 2018 más de 3.000 toneladas de ayuda humanitaria entre las capas de población afectadas", comunicó.
El CICR también proporcionó 158 toneladas de materiales de construcción y accesorios para suministro de agua, más de ocho toneladas de instrumental médico, 196 toneladas de alimentos para animales y 4,5 toneladas de aislantes térmicos para viviendas.
"La oficina del CICR en Lugansk reparó en 2018 once viviendas destruidas durante el conflicto y suministró muebles, equipos y artículos de uso doméstico para sus habitantes", agregó.
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El Comité proporcionó además materiales para mejorar la seguridad de dos escuelas situadas cerca de la línea de separación de las partes en conflicto, realizó los proyectos de construcción de una nueva tubería de agua para dos mil habitantes de la población Zolotoe-5 y de tendido de una línea eléctrica de un kilómetro de largo hasta una guardería de Novosvetlovka.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia cuyo resultado la ONU estima en más 10.300 muertos, además de unos 1,8 millones de desplazados y afectados.