"No voy a comentar aspectos concretos del diálogo, pero apoyaremos cualquier resultado negociado y mutuamente aceptado a condición de que su debate corresponda a las normas del derecho internacional", dijo la jefa de la diplomacia europea.
La diplomática evitó concretizar sobre las negociaciones informales en Viena de este 31 de agosto, pero apuntó que las partes hacen todo lo posible por mantener el diálogo y aprecian los esfuerzos de los demás por resolver los asuntos "más complejos y dolorosos".
El problema es complicado, aseguró, pero "no se puede decir que sea imposible de resolver".
"Entendemos las dificultades, el trabajo continuará", dijo.
Aleksandr Vucic, presidente de Serbia, se pronunció a favor de una división territorial entre los serbios y los albaneses en Kosovo y Metojia para evitar conflictos.
Hashim Thaci, líder de la autoproclamada república de Kosovo, indicó la semana pasada que a cambio de las regiones serbo-kosovares Kosovo quiere tres municipios de Serbia, habitados mayoritariamente por albaneses.
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No obstante, en las próximas negociaciones las autoridades de Kosovo decidieron evitar el tema del intercambio de territorios.
La UE espera que un acuerdo global y jurídicamente vinculante entre Serbia y Kosovo se firme antes de primavera de 2019.
Estados Unidos y la mayoría de los socios de la UE, así como muchos otros países, reconocieron la independencia de Kosovo, pero no Belgrado, ni tampoco Brasil, China, España, la India y Rusia.
Las autoridades serbias, presionadas por Bruselas y en busca de un acercamiento con la Unión Europea, así como para facilitar la vida de los serbios residentes en esa región serbia que se proclamó independiente, se vieron obligadas en 2011 a entablar negociaciones bajo mediación de la UE sobre la normalización de relaciones con Pristina.
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Los acuerdos más importantes alcanzados hasta hoy son el Acuerdo de Bruselas de 2013 y el acuerdo de 2015 sobre la Comunidad de Municipios Serbios.
Pristina, sin embargo, no cumplió con los términos de los acuerdos hasta el 4 de agosto, fecha límite establecida por Bruselas.
