"La situación en la línea de separación es preocupante", dijo la canciller a los periodistas antes de sostener negociaciones con el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, quien llegó en visita de trabajo a Alemania.
Anteriormente, el Ministerio de Defensa de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD) informó del empeoramiento de la situación en Donbás.
Según sus datos, el Ejército ucraniano disparó unos 900 proyectiles contra la RPD solo en la primera mitad del domingo.
El lunes, el fuego abierto contra la ciudad de Makeevka se saldó con una persona muerta y tres heridos.
Los militares ucranianos al mismo tiempo afirmaron que los milicianos supuestamente intentaron tomar por asalto sus posiciones en Avdéevka.
Pese a los acuerdos de Minsk y varias treguas declaradas desde el inicio de la crisis, tanto el Ejército ucraniano como las milicias de Donbás denuncian violaciones casi diarias.
Según datos de la ONU, el número de muertos por el conflicto supera las 10.000 personas.