Diplomáticos griegos vinculan crisis migratoria con política de Ankara

El brusco incremento en el número de los migrantes, sobre todo los sirios, que llegan a Grecia se debe en parte a los cambios en el enfoque geopolítico de Turquía, declararon fuentes diplomáticas griegas al periódico Ekathimerini.

Los funcionarios vinculan el flujo de inmigrantes con las presiones políticas en Turquía, que se prepara para las elecciones anticipadas en noviembre, y con la reciente decisión de Ankara de unirse a los bombardeos contra los yihadistas del Estado Islámico (EI) en Siria.

"Turquía está facilitando o, por lo menos, no impide el desplazamiento de inmigrantes ilegales hacia Grecia pensando que de este modo evitará posibles atentados terroristas en su territorio en represalia por las operaciones militares que ha llevado a cabo en Siria", comentó un diplomático.

Un colega suyo indicó a su vez que Ankara pretende establecer una "zona muerta" en la frontera turco-siria para que los militares turcos puedan actuar libremente contra los yihadistas del EI y los kurdos sirios.

"Por eso (Turquía) estimula o, por lo menos, no obstaculiza el flujo de los refugiados desde los campamentos cerca de la frontera con Siria hacia el Egeo y Grecia", opinó.

Según los datos de la Agencia Europea de Fronteras (Frontex), unos 340.000 inmigrantes llegaron a la UE en los primeros siete meses de 2015, casi el triple en comparación con el mismo período de 2014.

Algunos expertos opinan que la actual crisis humanitaria, que vive Europa, es la peor desde la Segunda Guerra Mundial.