La media de la UE de los 28 se sitúa en un 3,5 % sobre el gasto público total en 2013, pero con grandes diferencias entre los países.
En cabeza figuran Dinamarca (8,8 %) y Luxemburgo (8,0 %).
Irlanda y Bulgaria comparten un 6,4 %, mientras que Finlandia registra un 5,8%, según el informe.
Suecia y Austria se quedan algo por debajo del 5 %, mientras que Bélgica, Francia, Hungría y Estonia se sitúan entre un 4,5 % y un 4 %.
Reino Unido, Eslovenia y Eslovaquia superan levemente el promedio, mientras que Alemania y Croacia se quedan justo en el 3,5 %.
Por debajo de la media se encuentran siete países de reciente adhesión a la UE, pero también una serie de países miembros de la antigua UE-15, entre ellos Portugal (2,3 %) y los Países Bajos (2,2 %).
El penúltimo lugar corresponde a España, donde el gasto asignado a protección social de familias y niños supone un 1,4 % sobre el gasto total.
Por debajo de España solo figura Grecia, con un 1,1 %, concluye la nota.