Según publicó el diario español La Vanguardia, el magistrado del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona sospecha en concreto que la estancia del expresidente catalán Carles Puigdemont en Bruselas (Bélgica) fue financiada con fondos públicos.
El juez indaga si el director de esta fundación, Víctor Terradellas, pedía subvenciones destinadas a la cooperación que en realidad se utilizaron para sufragar movimientos relacionados con el movimiento independentista.
En una conversación telefónica intervenida por la Guardia Civil en la que interviene Terradellas aparece el nombre del expresidente Puigdemont, sobre el que se dice "quiere seguir viviendo en Bruselas" pero no cuenta con fondos más allá del mes de agosto.
Durante la llamada, Terradellas asegura que "un amigo" le pidió 100.000 euros con esta misma "excusa", que "en agosto" se "acaba el dinero".
El argumento del juez es que algunas subvenciones destinadas a la fundación catalana se ingresaban en cuentas corrientes y salían en efectivo.
Según el magistrado, además, los 2 millones de euros recibidos por esta fundación soberanista no estarían "justificados", ya que "la documentación no revela una intensa actividad cooperativa" por parte de la entidad.