"El Gobierno Argentino no reconoce y rechaza la declaración de independencia proclamada por el Parlamento de Cataluña", dice un comunicado emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores horas después de un primer pronunciamiento en el que Buenos Aires expresaba su confianza "en la capacidad del Gobierno y de toda la Nación española para, a través del diálogo, restablecer la legalidad y el orden constitucional".
Poco después, el pleno del Senado de España aprobó la aplicación del artículo 155 de la Constitución para intervenir Cataluña.
De 262 votos 214 fueron por sí, 47 por no y una abstención.
En su segundo pronunciamiento, el Gobierno de Argentina sostuvo que "hace votos para que a través de los mecanismos constitucionales se restablezca la legalidad en el marco de una convivencia pacífica del pueblo español, garantizando la unidad e integridad territorial de España".
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El presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, destituyó al presidente de la Generalitat (Gobierno autonómico de Cataluña), Carles Puigdemont.
Además, Rajoy disolvió el parlamento de Cataluña y anunció para el 21 de diciembre la celebración de elecciones en esa comunidad autónoma de España.