En una conversación telefónica, Abe dijo a Obama que la comunidad internacional debe actuar decididamente, y al hacerlo enviaría un contundente mensaje a Pyongyang y contribuiría a prevenir una provocación mayor por su parte.
Anteriormente, Abe calificó de grave amenaza a la seguridad el anuncio, hecho por Corea del Norte, de que había efectuado la prueba de una bomba de hidrógeno.
La cadena de televisión NHK apunta a que Tokio podría prohibir nuevamente la entrada de barcos norcoreanos en puertos de Japón, incluso por motivos humanitarios, además de reintroducir las restricciones de viajes entre ambos países.
El secretario general del Gobierno japonés, Yoshihide Suga, mencionó también que Tokio pedirá al Consejo de Seguridad de la ONU la imposición de sanciones económicas contra el régimen norcoreano.
Corea del Norte se proclamó potencia nuclear en 2005 y realizó tres pruebas nucleares, en 2006, 2009 y 2013, que le valieron sanciones internacionales.