"No se perdona a los corruptos", dijo el mandatario en rueda de prensa en la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra (este), según reporte de la sala de prensa de Palacio de Gobierno.
La semana pasada, autoridades del Ministerio Público y la Fuerza especial de Lucha Contra el Crimen destaparon un desfalco de al menos 6 millones de dólares que había consumado un funcionario del Banco Unión en la localidad altiplánica de Batallas en el departamento de La Paz.
"Jamás vamos a proteger el tema de corrupción (…) si algo de profesional tengo, es la honestidad y la transparencia", remarcó el Jefe de Estado.
También recordó que en gobiernos anteriores no se castigaban a los funcionarios involucrados en hechos de corrupción, mientras que ahora se los procesa y envía a la cárcel.
"Lo que dijeron del Banco Unión está recuperándose una gran cantidad de recursos económicos" aseguró Morales.
El Gobierno descubrió el robo de 18 cajas de tarjetas de recarga para teléfonos móviles valoradas en 5,4 millones de bolivianos (algo más de 700.000 dólares).
"Los culpables tiene que ser procesados y castigados", sentenció.
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El Ministerio Público y la Policía boliviana continúan investigando los alcances de lo que podría ser una extensa red de corrupción en la banca estatal y otras entidades financieras del país.
