"Se proyecta para el 2020 nuevamente un crecimiento del 4% de la economía porque ya no estarían presentes los factores climáticos que han sido las principales causas de esta situación que tenemos actualmente, el panorama es esperanzador para Paraguay", dijo a Sputnik Masi.
La economía paraguaya entró hace unos meses en recesión técnica, tras conocerse el dato del Producto Interno Bruto (PIB) del segundo trimestre, que mostró una caída de 3% —el peor en 10 años— tras un dato previo de -2,1%.
Este crecimiento de los últimos 15 años se debió a que hubo un auge del precio de los commodities además de un aumento de las exportaciones de soja y carne vacuna.
Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo el 12 de noviembre que prevé un crecimiento de 4% para Paraguay en 2020, aunque estará condicionado a la situación de países como Argentina.
Masi sostuvo que la recesión económica del país en este año se debió a factores climáticos como sequías, inundaciones e incendios, que hicieron descender la producción.
Agregó que los precios internacionales de las materias primas agrícolas han bajado por la guerra comercial entre EEUU y China.
Según las autoridades paraguayas, la recesión que vive el país se explica en parte por los desempeños negativos de sectores como la agricultura, la manufactura, la construcción o la generación de energía eléctrica.
El sector agrícola experimentó en el segundo trimestre de 2019 un descenso interanual del 11,4% en su oferta, motivado por la caída de producción en la última campaña de soja por las condiciones climáticas adversas.
En ese mismo periodo la ganadería y la pesca se redujeron un 5,8%, la manufactura un 5,6%, la construcción un 12% y la electricidad y el agua otro 12%.
"Además, los precios y las economías de nuestros principales socios comerciales en el Mercado Común del Sur [Mercosur], que son Argentina y Brasil, tampoco han ayudado, Brasil crece muy poco y Argentina directamente no crece", expresó.
El 15 de octubre pasado, el FMI redujo del 2,4% al 2% la previsión de crecimiento del PIB brasileño en 2020.
Mientras tanto, Argentina presentó una caída del 2,5% del PIB en 2018 y en el primer semestre del 2019 se contrajo un 2,5% adicional.
Masi sostuvo que las dos recesiones económicas previas de Paraguay, en 2009 y en 2012, fueron provocadas por grandes sequías o intensas lluvias que afectaron la producción agropecuaria.
"A pesar de todo, lo que ha pasado en los años siguientes de una recesión económica, tanto en el 2010 como en el 2013 ha habido un efecto rebote de la economía y hemos crecido muchísimo", reflexionó.
Según el Banco Mundial, en agosto de 2019 la inflación de Paraguay fue de 2,8% o interanual y en enero a agosto de 2019, el presupuesto del Gobierno central se ejecutó con un déficit del 1% del PIB estimado.
El mandatario Mario Abdo Benítez reconoció al presentar el 1 de julio su primer informe de gestión al Congreso que la economía fue uno de los "grandes desafíos" de su administración y señaló que el factor climático afectó la producción agropecuaria.
