"Estas elecciones primarias no son una elección, propiamente dicha, sino una ratificación de candidatos que ya han sido seleccionados por las organizaciones políticas", argumentó la vocal del TSE Dunia Sandoval, en una carta en la que plantea la suspensión de los comicios intrapartidarios, según publicaron diarios locales.
La propuesta fue rechazada en principio por la presidenta de la Cámara de Diputados, la oficialista Gabriela Montaño, quien dijo a reporteros que mientras esté vigente la ley de Organizaciones Políticos que manda realizar las primarias, los vocales del TSE "no pueden incumplir la norma".
El debate ocurría mientras activistas de comités cívicos de varias ciudades cumplían una semana de huelga de hambre en demanda de que el TSE revoque la habilitación del presidente Evo Morales como candidato para un eventual cuarto mandato consecutivo.
Radio: Bolivia, en tensión
La posición de los vocales Sandóval y Costas coincidió con planteamientos de candidatos y líderes de la oposición que cuestionaron la "inutilidad" de unas primarias para las que todos los partidos tienen candidaturas únicas.
"Este gasto no se justifica porque habría que realizar un despliegue de logística para muy pocos electores (y) la desproporción de las cantidades de militantes en las organizaciones políticas imposibilitaría la presencia de delegados de las organizaciones políticas pequeñas en la mayoría de las mesas", advirtió la vocal.
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De los 1,7 millones de votantes partidarios habilitados, casi un millón son del Movimiento al Socialismo de Morales y el resto está repartido entre los otros siete partidos inscritos para las primarias.
La diputada Montaño replicó que la cuestión económica no era razón suficiente para suspender las primarias, a las que calificó como "un ejercicio de fortalecimiento de la democracia interna de los partidos".
"Se gastará casi el doble de dinero en recuperar las instalaciones del Tribunal Departamental Electoral de Santa Cruz, quemadas por la oposición, que para las primarias", afirmó, en referencia a los actos vandálicos ocurridos la semana pasada durante una manifestación antigubernamental en esa ciudad.
Entretanto, la huelga de hambre de los activistas cívicas parecía lograr poco impacto en la opinión pública, con mínima cobertura inclusive de los medios.
El presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, Fernando Cuéllar, que lideraba esa protesta, fue dado de baja el miércoles y se recuperaba en un centro médico.
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